¡Bendito sea el que no haya sido tocado por la delicuencia!.
En un país donde se han perdido los valores, nos conseguimos a diario testimonios de personas que han sido victimas del hampa, unas mas fuertes que otras, pero que, en definitiva, son traumáticas e indignantes.
Este blog nació de eso, de la indignación, de las injusticias que se viven del día a día, del miedo a la pregunta ¿que será del futuro de nuestros hijos si esto sigue así?...Nuestro país, que está demás decir que es bellisimo, único sin discusión , rico y bendito por Dios con tantas maravillas que existen, está poco a poco, perdiendo su brillo; y nosotros sus hijos, los venezolanos que nos empeñamos en seguir aquí, que aun tenemos esperanzas de que la situación cambie, muchas veces nos sentimos de manos atadas, no vemos un rumbo certero, no vemos una salida a dicha situación.
En definitiva, no quiero seguir en un país de comiquita, quiero sentirme mucho mas orgullosa de lo que ya estoy de Venezuela, que superemos, que progresemos, que seamos una verdadera potencia como país, pero para eso, nos debe doler en el pecho cada injusticia, debemos humanizarnos nuevamente, debemos ser ejemplo para dar el ejemplo.
El comienzo de un verdadero cambio, esta en nosotros, en nuestros hogares, en la crianza de nuestro hijos; si dentro de 10 o 15 años mas, este país no ha mejorado, seremos nosotros los únicos culpables. Nuestro hijos ya serán hombres y mujeres y solo nosotros seremos los responsables de que rumbo ya sea bueno o malo tomen ellos.
Debemos tomar las riendas de la educación de nuestros hijos a como de lugar, buscas espacios de aprendizaje, retomar los valores perdidos, dedicarle tiempo, tanto como se pueda. Comencemos hoy por ejemplo, dejando a un lado el celular, la tablet, apaguemos la tv y comencemos por saber como estuvo su día hoy. Que sea el comienzo de la nueva Venezuela que muchos queremos.